En el marco del Ciclo de Coyuntura de la Bolsa de Comercio, el economista Diego Dequino disertó sobre los desafíos de la economía argentina y el protagonismo de los créditos hipotecarios.
El especialista destacó que “hay un retorno a la zona de confort” y en ese sentido subrayó las variables estudiadas en materia de crédito hipotecario a partir de un análisis de los últimos 25 años, tomando como referencia la década anterior “en la cual el crédito hipotecario fue un fenómeno real en la Argentina”, analizó Dequino.
“Si tenemos en cuenta el porcentaje del crédito hipotecario como porcentaje del PBI, podemos decir que este año estamos en un proceso claro de aceleración del crédito hipotecario. Si se mantuviera la tendencia de este año, en 2021 podríamos alcanzar la mitad del stock vigente durante el 2000, un poco más de tres puntos del PBI”, proyectó Dequino. A partir de este contexto, consideró que “hay un largo recorrido que recién empieza a asomarse y que representa enormes oportunidades en la materia, que pueden llegar a significar más de seis puntos del PBI en crédito hipotecario para el futuro”.
A su vez, el economista se refirió al marco internacional vinculado al crédito: “El mundo está prestando más barato que en los ’90. Ante este marco, si el riesgo país baja, la tasa interna también bajará. Esto permitirá que en cuatro años pueda haber unas 150 mil viviendas de 150 mil dólares y aunque esto implica un crecimiento enorme, no recompone la mitad de lo perdido en el 2005”.
El especialista destacó el rol de las instituciones económicas y políticas para que se concrete un crecimiento efectivo y, para ejemplificar el posicionamiento de Argentina ante otros países de Latinoamérica destacó el Índice de Facilidad para Hacer Negocios (Doing Business). Entre los países analizados Chile es el mejor ubicado (47°), seguido por Argentina (116°), Brasil (123°) y Venezuela (186° de 190).
“De los 10 componentes que forman el índice, Argentina se encuentra rezagada respecto a sus vecinos latinoamericanos en facilidad para abrir una empresa, manejo de permisos de construcción, impuestos y comercio exterior. La agenda de gobierno ya atacó parte de estas debilidades con nuevas leyes y la quita o reducción de retenciones, impuestos y subsidios, entre otros. La mejora del ambiente para hacer negocios llevará a mayor crecimiento económico, pero este cambio dependerá de la velocidad y profundidad en las mejoras en los ítems destacados”, concluyó Dequino.