(AP) El gobierno de Israel anunció formalmente que comenzará a hacer todos los trámites para cerrar de manera definitiva la cadena de noticias panárabe Al Jazeera, a la que acusó de “incitar a la violencia”.
El ministro de Comunicaciones israelí, Ayoub Kara, informó en conferencia de prensa que avanzará sobre “todo el mecanismo legislativo para crear la autoridad” y “cerrar lo antes posible” al medio de comunicación, cuya sede se encuentra en Doha, Qatar, y cuya agenda principal es Medio Oriente y el mundo árabe.
Kara explicó que va a pedir que se cancelen todas las acreditaciones de los periodistas de Al Jazeera y que se bloqueen sus emisiones en Israel, según el diario Times of Israel.
Mientras la cadena de noticias qatarí denunció el anuncio como un ataque a la libertad de prensa, el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahul, celebró la iniciativa de su ministro. “La cadena Al Jazeera no deja de fomentar la violencia en torno al Monte del Templo (denominación judía para la Explanada de las Mezquitas); he pedido varias veces a quienes hacen cumplir la ley que cierren su oficina en Jerusalén”, señaló Netanyahu en un comunicado en su cuenta de Facebook.
Mientras las críticas y denuncias del gobierno israelí contra este medio no son nuevas, ésta es la primera vez que Netanyahu puede utilizar como argumento que los propios vecinos y ex socios de Qatar -principalmente Arabia Saudita, Egipto y Emiratos Árabes Unidos- también cerraron las oficinas de Al Jazeera, en el marco de su enfrentamiento diplomático con Doha.
“Basamos nuestra decisión en la iniciativa de Estados árabes sunnitas de cerrar las oficinas de Al Jazeera y prohibir su trabajo”, destacó Kara. A principio de junio pasado, Arabia Saudita, Egipto y Emiratos Árabes Unidos lanzaron un ataque diplomático contra Qatar por su presunto apoyo a grupos extremistas: cortaron relaciones diplomáticas, bloquearon el comercio y hasta cerraron su espacio aéreo.
En una ofensiva sin precedentes, le presentaron a su vecino una lista con demandas, entre las que se destacó el cierre definitivo de Al Jazeera, un medio que supo incomodar en el pasado a los gobiernos de estos países de Medio Oriente, principalmente con su cobertura de los levantamientos populares conocidos como Primavera Árabe.