El 12-S finalmente marcó un cambio de época en la política argenta. La derrota
contundente que sufrió el Gobierno a manos de Juntos por el Cambio sirvió para
reconfigurar incluso al arco opositor con ganadores y perdedores también de ese lado del
mostrador.
Porque las Paso, con un resultado consecuente con el vacunatorio VIP, la impune fiesta de
Olivos con el cumpleaños de la Primera Dama, Fabiola Yáñez, y una economía que aún no encuentra el rumbo para salir hacia la nueva normalidad, sirvieron no sólo para definir las candidaturas de noviembre. Fueron útiles, además, para arrancar un nuevo ciclo en el mapa político actual. Y en esa reconfiguración, los vencedores se encuentran en filas de JxC; con nuevas referencias nacionales y cordobesas.
Ganadores
Luis Juez. El exintendente volvió a ganar una elección después de 12 años. La última había sido en las Legislativas del 2009 y también en la carrera al Senado. El triunfo de Juez
ratificó además que Córdoba es una provincia, ante cualquier otra definición, antikirchnerista. Y se va a inclinar por quien mejor represente esa oferta. Y logró un triunfo
no sólo ante el radical Mario Negri, sino también ante el expresidente Mauricio Macri,
quien lo ninguneó en varias oportunidades en la campaña.
Rodrigo de Loredo. El radical se sacó la espina de la interna UCR y venció al eje Negri-
Mestre. Ahora tiene la responsabilidad de liderar -sin egos- un radicalismo joven, con el
respaldo de intendentes que hicieron un gran papel como es el caso del riotercerense
Marcos Ferrer, el jefe de campaña en las Paso. El futuro de la sociedad política con Juez, a
pesar del triunfo es una incógnita que se tensará si existe un objetivo en común: la
gobernación 2023.
Patricia Bullrich. Fue el halcón que cantó victoria. Apostó por la lista Juez-De Loredo y
no se equivocó. Su incidencia a futuro abre un nuevo escenario también para el PRO
cordobés; con jugadores, como Laura Rodríguez Machado y Héctor Baldassi, que también
fueron desplazados por Macri. Esa reconstrucción amarilla puede incluir además a Juez.
Horacio Rodríguez Larreta. Sin la contundencia de Bullrich, el jefe de Gobierno porteño
también apostó por la lista de Juez. Felicitó a los ganadores y metió festejo tibio porque
Macri no cantó victoria en Córdoba.
Martín Lousteau. El senador radical sonrió por varios motivos: no deberá compartir
protagonismo en el Senado con Negri y plantó, con De Loredo, la semilla para poner un pie
en Córdoba. Esa germinación, que sigue de cerca ‘Coti’ Nosiglia, dependerá también de
Ferrer.
Perdedores
Mauricio Macri. Se equivocó con la bendición a Santos. En abril le habían marcado que
era un error la apuesta apresurada; no entendió y pagó. El PRO, como el resto de JxC en
Córdoba, ahora atiende otros teléfonos.
Mario Negri. Jugada innecesaria y derrota de las que duelen. Queda esmerilado su poder
en el Congreso para sostenerse como líder del interbloque opositor en Diputados.
Gustavo Santos y Soher El Sukaría. La apuesta por el macrismo explícito les costó caro.
Él, deberá ensamblarse al resto del armado para noviembre, pero sin los condicionamientos
con los que intentó negociar hasta hace algunas semanas. Ella, pierde poder de fuego en la
interna amarilla y queda en desventaja con respecto a los orgánicos y Baldassi.
Alberto y CFK. Derrota nacional e inevitable revés en Córdoba. En el país, inesperado;
sobre todo porque creían que se ganaba en provincia de Buenos Aires; en Córdoba, habla
de un desconocimiento – ¿y un desprecio? – por los armados en el distrito. En territorio
mediterráneo dejaron todo en manos de un Carlos Caserio que hizo una de las peores
elecciones de la fuerza. Sin carisma, sin poder convertirse en el líder del espacio y con un
discurso confrontativo con Schiaretti que no le sirvió. Al contrario.
A seguir trabajando
Juan Schiaretti. El gobernador se cobró revancha de su propia prescindencia en 2019 y
quedó a las puertas de recuperar la banca en el Senado. Además de sumar, por lo menos,
dos diputados. Sin embargo, el distanciamiento con Nación, ya no será igual. Desde Casa
Rosada irán por los gobernadores y Schiaretti está en la hoja de ruta.