Una marca de ropa deportiva y urbana que nació en Córdoba de la mano de su creadora, Laura Loza, hace ya tres años. Hoy se distingue por su increíble calidad, estampas innovadoras y creativas y sobre todo por su desafío de curva de talles.
Lau, contanos, ¿cómo es el proceso creativo de la marca y de las estampas?
Soy una persona muy innovadora y amante de la moda, siempre estoy buscando, estudiando y analizando las nuevas tendencias. En mis momentos de mayor creatividad, me imagino estampas, colores y texturas, que luego se las transmito a mi asesora de confección e imagen y a la diseñadora, que son quienes me ayudan a darle forma a mis ideas. Mis colecciones siempre se caracterizan por sus estampados originales y llamativos, como así también por la calidad de las telas.
Hoy el foco lo hacen en la variedad en curva de talles, ¿cómo surgió la idea? ¿Qué proponen desde la marca?
Y así como nos fuimos superando, también atravesamos el proceso de deconstruirnos y empoderarnos como mujeres, que es quizás una fase en la cual aún nos encontramos pero que transitamos con mucho amor y apoyo de nuestras clientas, seguidoras y amigas, de quienes aprendemos en el día a día. Al ser una marca deportiva, cuando comenzamos con las campañas de marketing para alcanzar a nuestro público objetivo buscábamos representar a la ‘Chica Fitness’, pero la realidad es que nos pedían nuestras prendas mujeres reales, es decir de todas las edades, cuerpos y estilos diversos, por eso es que decidimos ser conscientes de ello y dejar de lado los estereotipos hegemónicos. Entonces incluimos pluralidad en nuestro staff de modelos y apostamos por continuar este proceso mediante futuros castings que estaremos convocando a través de nuestras redes sociales.