Un año complejo, de alta incertidumbre y mucha exigencia. Así define Cecilia Stampella el 2021 de Galmes Digital, ya que a los desafíos que presenta el país habitualmente (crisis económica e inestabilidad política más las elecciones de medio término) se sumó la pandemia y uno interno: haber diversificado la estrategia de la
empresa con la creación de una unidad de software factory.
Sin embargo, no duda en afirmar que “el balance es muy positivo”. Es más: asegura “el 2022 será un año de crecimiento y desarrollo, tanto interno como en el alcance de mercado, ya que planeamos llegar a mercados externos con nuestros servicios”.
Consultada respecto a cuánto influye el contexto político/económico en el día a día de la compañía, la empresaria afirma que “en realidad vale preguntarse por qué invertir en empresas de tecnología cuando la mitad de la población del país vive en condiciones de pobreza estructural. Si queremos terminar con la pobreza y la ineficiencia estructural de nuestra economía, necesitamos de la tecnología”.
En ese sentido, Stampella destaca la potencialidad argentina en materia tecnológica, “incluso a pesar de las repetidas crisis económicas sufridas en los últimos años”. Y cita ejemplos concretos: “Argentina es el país latinoamericano con más unicornios per cápita y supera en términos absolutos a España y Francia. No obstante, la inestabilidad macroeconómica de los últimos diez años ha producido un estancamiento en el sector,
particularmente en la pérdida de velocidad y tasa de creación de empresas”.
Así, la brecha tecnológica “es ya la causa de la verdadera desigualdad. Por esta razón, la educación tecnológica no constituye el privilegio de unos pocos. Debemos, en forma consciente y deliberada, desterrar de una vez y para siempre la nefasta idea de que la tecnología es para ricos y superdotados. Debemos dar el paso fundamental para alcanzar un país más desarrollado e igualitario”, destaca Stampella.