El juez federal Claudio Bonadio citó a prestar declaración testimonial a quienes eran presidentes de la Cámara de Diputados y el Senado en 2013, y a los jefes de bloque que estaban en funciones cuando se aprobó Memorándum con Irán. Es el marco de la causa que investiga, entre otros, a la ex presidenta Cristina Kirchner y el ex canciller Héctor Timerman por traición a la patria.
Desde el próximo lunes 9 y hasta el 12 de octubre Agustín Rossi, Ricardo Gil Lavedra, Federico Pinedo, Guillermo Carmona, Diana Conti, Jorge Yoma, Miguel Angel Pichetto, Ernesto Sanz, Rubén Giustiniani, Daniel Filmus, Marcelo Fuentes y Pedro Guastavino, deberán pasar por Comodoro Py para declarar ante Bonadio.
En tanto, el magistrado dispuso que en el caso de los legisladores que actualmente estén en funciones podrán optar por declarar por escrito tal como lo establece el Código Procesal Penal de la Nación. Con este procedimiento, Bonadio hizo lugar a un pedido planteado por la parte querellante en la causa en la que está denunciado el ex canciller Héctor Timerman.
Es que para los abogados de la querella la solicitud tiene por objeto indagar a los legisladores sobre la información que entregó el Poder Ejecutivo Nacional a las distintas comisiones y a los miembros informantes. En particular, lo que se buscan es que diputados y senadores expliquen las razones y el objeto del proyecto de ley que aprobó los términos del acuerdo al que había arribado el gobierno encabezado por Cristina Kirchner con la administración iraní sobre la investigación del atentado a la AMIA.
Asimismo, estos letrados indicaron que quieren conocer si se realizaron reuniones secretas con funcionarios de la República Islámica de Irán y cuál habría sido la incidencia del Memorándum sobre las alertas rojas decretadas por Interpol. En ese sentido, señalaron que su intención es que tanto diputados como senadores expliquen si la firma del acuerdo tenía como correlato algún tipo de contrapartida.
Vale recordar que esta causa se inició por una denuncia contra Timerman a raíz de una conversación telefónica entre el ex canciller y Guillermo Israel Marcos Borger, quien era presidente de la AMIA. En esa charla, el ex ministro de Relaciones Exteriores kirchnerista le manifestó a Borger que la República Islámica de Irán fue la responsable del ataque terrorista a la sede de la AMIA.