Siguiendo la línea de análisis de lo que dejó y puede deparar el mercado, desde la firma de inversiones Cohen & Asociados, su estratega en Jefe, Martín Polo repasa lo que se concretó en el cierre del 2023 y lo que veremos en el corto plazo.
“En la primera semana del año, se publicará la recaudación de diciembre y las primeras estimaciones privadas de inflación, que se espera que promedien un 30% mensual. Además, será importante seguir la evolución de la brecha cambiaria, especialmente tras el repunte experimentado en los últimos dos días. Por otro lado, el Gobierno tiene previsto enviar otro proyecto de ley al Congreso, enfocado en eliminar 160 regulaciones adicionales. Asimismo, está programada la segunda licitación de bonos del Tesoro indexados al tipo de cambio oficial (BOPREAL), en la cual se evaluará si los nuevos incentivos propuestos son suficientes para atraer a los importadores”, apunta.
Moverse con cautela
El analista remarca que los dólares financieros comenzaron a mostrar señales de repunte “y, según nuestra perspectiva, todavía tienen un recorrido alcista. Por esto, recomendamos dolarizar una porción significativa de la cartera. Esta dolarización puede realizarse a través de bonos soberanos, que siguen mostrando una buena relación riesgo-retorno, aunque recomendamos incorporarlos con cautela. Sus paridades ya no reflejan quitas del 50% y las ganancias futuras dependerán del éxito del programa de Milei”.
En ese punto afirma que los bonos favoritos son el GD30 y el GD38. “Nos enfrentamos a meses desafiantes, con inflaciones récord, un elevado malestar social y una caída significativa en la actividad económica. Para inversores más conservadores, recomendamos incorporar bonos provinciales, corporativos ley Nueva York o CEDEARs”.
Mirando el universo de herramientas en pesos remarca que hay que inclinarse por los bonos dollar-linked: “Creemos que sus tasas positivas compensarán la muy fuerte inflación que esperamos para el 2024. En términos de duración, preferimos un mix entre el tramo corto (TDF24 y TV24) y el tramo largo (TV25). Dentro de la curva CER, recomendamos tomar ganancias de los bonos de 2026 en adelante (TX26, TX28, DICP y PARP), que convalidan tasas reales de largo plazo demasiado bajas”.