La inflación, la precarización del mercado laboral y la pérdida de poder adquisitivo impulsó la suba de la pobreza, que en el primer semestre de este año llegó a 35,4% y afectó a 14,4 millones personas si se toma como referencia una proyección de la población total urbana. Esto significó que en 12 meses 3,4 millones de argentinos cayeron en la pobreza.
Si se toma la población total -incluyendo la rural- son 15,8 millones de pobres. La indigencia fue de 7,7%, subió 2,8 puntos puntos y afectó en el área urbana a 3,1 millones de personas.
El dato conocido ayer será el último que difundirá el Indec antes del cierre de la gestión de Mauricio Macri. En ese sentido, el actual presidente terminará con un número de pobreza más elevado que el que dejó Cristina Kirchner en 2019. Entonces, la Universidad Católica Argentina (UCA) estima que afectaba al 29% de la población. Era el único dato que existía porque desde 2014 la ex mandataria y el entonces ministro de Economía, Axel Kicillof, habían decidido no publicar datos oficiales sobre pobreza.
Un año atrás, la pobreza era de 27,3% y la indigencia, de 4,9%, según la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec.
El último dato había sido el del segundo semestre de 2018, que ya comenzaba a mostrar el freno de la economía, la licuación de los ingresos y la espiralización de los precios. Entonces, la pobreza alcanzó un 32% y la indigencia llegó al 6,7%.
La siguiente medición del Indec sobre pobreza e indigencia será dada a conocer por el próximo gobierno y corresponderá al segundo semestre de 2019, donde se verá el impacto de la última devaluación posterior a las PASO y lo que suceda antes y después de las elecciones presidenciales del 27 de octubre. Estas cifras, entonces, son la última foto de su gestión al menos hasta 2019. Tras asumir como presidente, Mauricio Macri había pedido que evalúen su gestión por el nivel de pobreza.
“El promedio semestral encubre situaciones coyunturales distintas. De esta manera, la primera mitad del año es el resultado de un primer trimestre que, por una cuestión de estacionalidad en los ingresos, contenía cierto efecto de alivio con una tasa de pobreza del 34,1% y una indigencia del 7,1%; y un segundo trimestre, que estimamos en función de los resultados semestrales, ubica a los niveles de pobreza e indigencia en los valores más altos registrados durante, por lo menos, toda la gestión de Cambiemos”, destacaron desde IPyPP. Las proyecciones del instituto para la segunda mitad del año muestran una tasa de pobreza alcanza el 36,7% mientras la indigencia el 8,3%.