Aunque no se habló de números, una fuente bancaria dijo que el negocio podría valer alrededor de 1000 millones de euros (u$s 1200 millones), según la agencia Reuters.
«Reebok y Adidas serán capaces de cumplir con su potencial de crecimiento significativamente mejor de forma independiente«, afirmó el presidente ejecutivo Kasper Rorsted en un comunicado.
Adidas compró Reebok por u$s 3800 millones en 2006, pero su escaso rendimiento hizo que los inversores pidieran repetidamente que se deshiciera de la marca.
En tanto, Adidas consiguió ganar terreno frente a Nike en los Estados Unidos con su marca principal, ayudada por la asociación con celebridades como Kanye West, Beyonce y Pharrell Williams.
Las ventas netas de Reebok bajaron un 7% en el tercer trimestre de 2020 a 403 millones de euros (u$s 488 millones), después de haberse hundido hasta un 44% el trimestre anterior. En 2019, Adidas redujo el valor contable de Reebok a casi la mitad, en comparación con 2018, a 842 millones de euros.
Las opciones para Adidas incluyen la separación de Reebok como una empresa pública independiente, o la venta de la marca a una empresa de capital privado u otro gran minorista deportivo.