El Gobierno nacional anunció que reconsidera la ubicación del proyecto de construcción de la quinta central nuclear, que iba a ser localizada en Río Negro, «a la luz de la nueva posición» del gobernador Alberto Weretilneck, quien el viernes hizo pública la decisión de rechazar su instalación en la provincia, tras ser uno de sus impulsores.
Así lo planteó el Ministerio de Energía a cargo de Juan José Aranguren mediante una comunicación en la que recordó que «el gobierno de la provincia manifestó su total acuerdo y entusiasmo con la iniciativa», y afirmó que es necesario «fomentar y no clausurar a partir de un análisis electoral» el debate sobre el tema para que sea «la propia ciudadanía la que juzgue esto».
La reacción oficial se conoce luego que el viernes el gobernador anunció el envío de una nota al Gobierno nacional «rechazando definitivamente la instalación de la central nuclear en Río Negro» luego de que en los últimos meses ambientalistas, vecinos y sectores políticos comenzaron manifestarse en oposición por los supuestos riesgos ambientales del proyecto energético.
En ese contexto, el Ministerio anunció que se está «reevaluando el proyecto a la luz de la nueva posición del gobernador Weretilneck», el cual consiste en «la expansión de la fuente nucleoeléctrica para cumplir con los objetivos de seguridad energética y mitigación del impacto en el cambio climático, en el marco de un proyecto integral que incluye la expansión de fuentes de energías renovables (hidroeléctrica incluida) y térmicas».
«No se trata solamente de construir una central nuclear en Rio Negro»; enfatizó la cartera energética en un extenso escrito en el que expresó las disculpas «con la gran cantidad de trabajadores, técnicos y profesionales argentinos que han trabajado en el proyecto, muchos de los cuales residen en Río Negro».
Esta decisión fue comunicada hoy a todos los participantes de la segunda reunión del Consejo Federal de Energía (CFE) que cerró hoy en Buenos Aires, dentro del marco del Acuerdo Federal Energético, y del que participó Aranguren, el subsecretario de Energía Nuclear, Julián Gadano, junto a representantes de 18 provincias y los ex secretarios de Energía Daniel Montamat, Emilio Apud, Jorge Lapeña y Raúl Olloco.
El Ministerio repasó la cronología de estudios y decisiones que se tomaron desde el año pasado que llevaron a determinar que el área rionegrina de Sierra Grande reunía las condiciones apropiadas para la instalación de una central nuclear, lo cual aún no había sido oficializado pero que incluso contaba con el visto bueno de técnicos chinos, quienes tendrían a su cargo la construcción y la financiación de la obra por unos 8.000 millones de dólares.