El Gobierno que encabeza Mauricio Macri disminuyó las retenciones a la soja en unos 20 mil millones de pesos. El objetivo es impulsar las ventas al exterior, ya que se había registrado una fuerte caída. De todas manera, esta medida implica que el Fondo Federal Solidario destinará unos 6 mil millones de pesos menos para las provincias.
Con esta disminución el Fondo Federal Solidario, que distribuye el 30% de las retenciones a la soja enviará unos 6 mil millones de pesos menos a las provincias a lo largo del año. Además, también hubo modificaciones en las retenciones provenientes del poroto de soja y del aceite de soja, las cuales caerán en un 0,5% mensual, para bajar del 30% y 27% que tenían hasta 2017 para llegar al 18% y 15%, respectivamente, para finales de 2019.
En tanto, trascendió que desde el Ejecutivo relativizaron esta caída en los montos destinados a las provincias, ya que advirtieron que serán compensadas por la modificación del Impuesto a las Ganancias, el cual será un 100% coparticipable. Es que los decretos 1343/16 y 1025/17, medidas por las que cayeron las retenciones, buscan que haya un sistema de convergencia para los porcentajes de retenciones en todos los subproductos del complejo sojero.
Además, las retenciones móviles al biodiésel pasarán a ser fijas y de un 8%, al tiempo que bajaron las que se refieren al poroto de soja y del aceite de soja. El cambio en la disposición del biodiésel tiene como objetivo una mayor recaudación, siendo que el Ejecutivo espera conseguir unos 2.000 millones de pesos. Pero este monto no compensará los cambios definidos en el poroto y el aceite tendrá un impacto fiscal cercano a los $ 40.000 millones, desde 2019.
Asimismo, entre los considerandos del Decreto que marcó las nuevas cifras para los subproductos sojeros, afirmaron: «Se hace necesaria una armonización entre los derechos de exportación del biodiésel y el de su principal materia prima, el aceite de soja, para alcanzar una convergencia entre los mismos».
Vale destacar que el año pasado la industria sojera padeció una fuerte caída; los porotos cayeron un 17% en los primeros 10 meses del año, la harina de soja se retrajo en un 14,5%, el aceite de soja, el que menos padeció la reducción, disminuyó un 1,15%, y el biodiésel, tras el cierre del mercado norteamericano que no pudo suplirse con el europeo, sufrió un descenso del 4,1%.