En el contexto de una economía en caída y de alta inflación, las automotrices son uno de los sectores más golpeados debido a que gran parte de sus insumos tiene componentes importados (sumado a la abrupta caída en el poder adquisitivo de los salarios).
De acuerdo con la Asociación de Concesionarios de Automotores (ACARA), las ventas de 0km en diciembre de 2023 fue de 18.498 unidades (versus 19.635 en 2022). Si se consideran todas las unidades vendidas en todo el año, estas fueron de 449.438 unidades (versus 407.533 unidades en 2022).
Si bien, en diciembre de 2023 las ventas cayeron 6% en relación con el 2022, en el consolidado 2023 la cantidad de patentamientos fue superior al del 2022. La proyección para este 2024 será de una caída más acentuada.
Aunque el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) plantea una desregulación, reducción de trámites y disminución de los costos en el registro automotor, los impuestos que involucran la compra de un 0Km continúan siendo altos
Así, una persona con un salario neto de $484.000 desea comprar un Fiat Cronos 0Km (precio $18.082.000), y destina el 100% de su salario a los pagos este, se demorará 37 meses en adquirirlo, pero si destina solo el 15% de su salario demoraría 249 meses (es decir, 20 años).
En el caso de que tome un préstamo personal a 36 meses, debería pagar cuotas de $2.301.813. Es decir, necesitaría la totalidad de su salario y $1.817.814 más de ingresos extras para comprarse un auto 0Km con el pago de su cuota mensual.
El valor de un auto en el 2024 en relación con 2022, más que triplicó el valor de su precio en pesos. Por su parte, su valor en dólares sufrió una caída debido a que el peso se depreció más que el aumento de la divisa norteamericana.