A partir de las últimas proyecciones que manejan las Bolsas (de Cereales y de Comercio) y de estimaciones propias, en el IERAL de la Fundación Mediterránea se construyeron tres nuevos escenarios para la cosecha, que dan lugar a otros tantos escenarios de ingresos, exportaciones y aporte a la recaudación de derechos de exportación.
“Las adversidades climáticas han continuado en lo que va del año (falta de lluvias, temperaturas extremas), profundizando su daño sobre la producción agrícola extensiva, principal fuente de generación de ingresos del sector agropecuario y de divisas del país”, señala el informe coordinado por Juan Manuel Garzón.
“Todas las variables asociadas a la actividad agrícola (producción, exportaciones, aporte a la recaudación) están siendo corregidas a la baja en las últimas semanas. La macroeconomía del 2023 no contará con los muy buenos números que logró el sector agropecuario en los últimos dos años con su cosecha”, plantea Garzón.
Se tiene un escenario “base”, otro llamado “base mejorado” (que da posibilidad de alguna sorpresa positiva, aunque poco probable, en próximas semanas) y un tercero referido como “base deteriorado”, que trata de captar fenómenos climáticos adversos muy recientes (heladas inusuales en zonas que venían relativamente mejor que otras).
Producción y exportaciones: supone una cosecha de 34,5 millones de toneladas en el ciclo 2022/23, importaciones por 6 millones de toneladas, molienda de 36 millones, exportaciones de soja grano por 1,5 millones y existencias finales en torno a los 2 millones de toneladas. En este escenario base, las exportaciones totales de principales productos agropecuarios y derivados industriales (granos, aceites, harinas, carne bovina y lácteos) se estaría aproximando a los USD 37,8 mil millones en 2023, con una caída de USD 8,4 mil millones respecto al año previo (-18%). Esta pérdida de divisas se agrava en el escenario base deteriorado (- USD 10,1 mil millones, -22%), mientras que sigue siendo alta, pero algo menor en el escenario base mejorado (- USD 6,5 mil millones, -14%)
Retenciones: En cuanto a los derechos de exportación, suponiendo alícuotas constantes en los niveles actuales, la recaudación sobre principales productos agropecuarios (y sus derivados industriales relevantes) podría aproximarse a USD 7.600 millones en el escenario base, estimándose una caída de USD 2.050 millones respecto al aporte estimado para este mismo grupo de productos en el 2022 (-21%). En el escenario base mejorado, la caída se reduciría para ubicarse en USD 1.500 millones (-16%), mientras que se ampliaría en el escenario base deteriorado, en la que llegaría a los USD 2.400 millones (-25% ia. sobre recaudación del grupo de productos y -19% i.a. sobre recaudación total del impuesto).
“El sector agropecuario quedará muy golpeado este año, afectado por un clima que ha sido sorprendentemente dañino para la producción, que ha incluido no sólo una inusual sequía en zonas de habituales buenos registros de precipitaciones, sino también situaciones muy atípicas en materia de temperaturas, con valores extremos, muy elevados seguidos a los pocos días de registros muy bajos”, redondea Garzón.