El ministro del Interior Guillermo Francos se reunió con los ministros de Bioagroindustria, Sergio Busso y a su par de Producción, Ciencia e Innovación Tecnológica, Pedro Dellarossa, luego del encuentro que Martín Llaryora realizó con productores de biocombustibles.
La reunión de Llaryora con ambos sectores sirvió para repasar el impacto negativo del proyecto de Ley enviado por el Ejecutivo Nacional al Congreso para modificar el régimen de las retenciones no sólo sobre la producción primaria, sino también sobre la maquinaria agrícola, así como el DNU publicado por Nación que afecta a los biocombustibles.
En ese sentido, el gobernador fue tajante: “se trata de un lobby de las petroleras para matar a la industria de bioetanol y biodiesel”.
Ante el ministro del Interior, Guillermo Francos, los funcionarios cordobeses le trasladaron la preocupación de los sectores antes mencionados. Busso explicó que se le pudo informar al ministro nacional el desacuerdo de la Provincia por ambas iniciativas.
En el caso de los biocombustibles, el ministro precisó que “nos parece que sería realmente muy complicado para toda nuestra industria, sobre todo del biotanol en Córdoba, retroceder una vez más en los cortes. Por eso hemos planteado que el punto de partida es sostener el 12% de los cortes de bioetanol y 7,5% de biodiesel, y discutir hacia adelante una nueva legislación que permita crecer como lo han hecho otros países de la región”.
La nueva reglamentación que el Gobierno nacional envió al Congreso, propone una desregulación en cuanto a los biocombustibles que generaría un gran retroceso sobre el reclamo que el Gobierno de Córdoba mantiene desde hace tiempo.
“Tampoco estamos de acuerdo con las retenciones, creemos que es una mala decisión aumentarlas. Nosotros apuntamos a la eliminación gradual de las mismas y en llevar a cero a todas las economías regionales”, precisó Busso sobre el proyecto que encabeza Llaryora.
Por su parte, Dellarossa indicó que “tuvimos una buena recepción y fuimos escuchados para ver si se puede lograr algún tipo de cambio, porque la posición de nuestro gobernador es tajante en cuanto a la defensa de la producción de Córdoba”.
Y añadió: “Deben volver a cero las retenciones a los fabricantes de maquinarias agrícolas, tanto los motorizados como los que no llevan motor, porque con el 15% de retenciones, nos deja fuera de poder competir en el exterior con productos argentinos. En ese sentido, estamos también tratando de proteger a la industria cordobesa”.
“Son muchísimas fábricas en muchos pueblos y ciudades de la provincia de Córdoba, incluso de Santa Fe y también de la provincia de Buenos Aires, que se ven muy perjudicadas por esta ley, entonces creemos que habría que hacer una pequeña revisión para no dejarlos fuera de competencia”, expresó Dellarossa.