(Bloomberg) Arcor, el mayor fabricante de caramelos del mundo está buscando un socio estratégico que lo ayude a expandirse fuera de América Latina. La empresa estaría dispuesta a realizar un intercambio de acciones con un socio para tener acceso a más mercados extranjeros, especialmente en Asia.
Luis Pagani, presidente y propietario mayoritario junto a miembros de su familia, dice que si bien las conversaciones aún no han comenzado, la propiedad familiar de Arcor podría atraer a otros fabricantes mundiales de dulces que valoran estructuras similares.
«Todos nos conocemos», dijo Pagani, durante una entrevista en su oficina en Buenos Aires. «Conozco a todos los propietarios y saben la importancia de Arcor en Estados Unidos”, sostuvo. Es probable que en algún momento Arcor intente vender acciones, mientras que Argentina se ha convertido en la favorita de los inversionistas en mercados emergentes que buscan aprovechar las políticas favorables a las empresas del presidente Mauricio Macri, pero Pagani dice que no siente la presión de apresurarse a hacer una oferta en este momento.
«Nunca haríamos una oferta pública inicial oportunista», sostuvo Pagani. «Solo lo haríamos mirando al futuro, como una forma de expandirse a otros mercados fuera de América Latina, muy probablemente a Asia, donde vive la mitad de la población mundial».
Pagani señaló que Arcor, fabricante de los bombones Bon o Bon, los chocolates Águila y las mermeladas La Campagnola, probablemente terminará este año con ingresos de US$ 3.100 millones y ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización de US$ 300 millones, lo que consolida su estatus como el mayor productor de alimentos de Argentina.
Arcor posee el 51 % de Bagley, un productor de galletitas de Buenos Aires cuya participación restante está en manos de Danone. También tiene una alianza estratégica con la panificadora Bimbo en México y una alianza de marca con Coca- Cola para vender productos en Perú.
La empresa buscará realizar adquisiciones en Latinoamérica, particularmente negocios de consumo, agronegocios y empaques en México y Brasil, que Pagani dijo podría pagar mediante el uso de su flujo de caja asumiendo nuevas deudas.
El productor de alimentos tiene el menor costo de endeudamiento entre sus pares argentinos, y la agencia crediticia Moody’s Investors califica los US$ 500 millones en bonos de Arcor. Desde que los bonos fueron vendidos en junio de 2016, han tenido un rendimiento del 15 %, superando el promedio corporativo del 9,8 % de los mercados emergentes.
Arcor se convirtió en un socio estratégico del mayor productor lácteo del país, Mastellone, en 2015, y como parte del acuerdo tiene la opción de convertirse en el accionista controlador para el año 2021, o incluso antes si paga una prima a los bonistas de Mastellone. Pagani dice que la asociación ha abierto la puerta a la exportación de productos a base de leche a África, Medio Oriente y Asia, donde los productos de la competencia provienen de Nueva Zelanda.
El precio final dependerá de los niveles de ganancias de Mastellone al momento de cerrar el acuerdo. La compañía láctea registró una ganancia ajustada de US$ 70 millones en 2016, y se prepara para finalizar el 2017 con una utilidad de casi US$ 100 millones, de acuerdo con documentos de bonos de Mastellone.
Pagani declinó dar un valor para Arcor, en la cual él y sus hermanos poseen una participación mayoritaria, citando preocupaciones de seguridad. Pero él dice que el negocio está preparado para un crecimiento a largo plazo.