A casi 24 horas de que los tres jueces del Tribunal Regional Federal de la 4ª Región de la ciudad de Porto Alegre ratificaran la sentencia en primera instancia contra Luiz Inácio Lula da Silva, la Justicia volvió a apuntar contra el ex mandatario. Es que un juez de Brasilia ordenó que se le retenga el pasaporte, a pesar de que tenía previsto viajar a Etiopía, ya que le prohibió salir de Brasil por «riesgo de fuga».
Según los medios locales, esta decisión ya le fue comunicada a la Policía Federal brasilera, quien es responsable del control en las aduanas de los aeropuertos, al tiempo que le solicitó al ex presidente que entregue el pasaporte. El argumento que esgrimió el Ministerio Público Federal de Brasilia es que existe «riesgo de fuga» debido a que Lula cuenta con diversas causas penales y acaban de ratificar una condena en segunda instancia.
Esta determinación complicaría la agenda del ex mandatario, ya que tenía previsto realizar un viaje este fin de semana a Etiopía para participar del Adis Abeba, en un evento internacional de la FAO contra el hambre. Incluso, al respecto, Lula había asegurado: «No es un viaje fácil, son 14 horas para ir, 14 para volver y 14 para estar allá».
En ese sentido, la FAO destaca desde su página web que el programa busca «Alcanzar el Hambre Cero en 2025», siendo que surgió en 2013 como una iniciativa de la Unión Africana y del Instituto Lula. Una medida que, en Brasil, se llamó «Hambre cero» y se convirtió en un programa generalizado para sacar a millones de personas de la pobreza extrema durante las presidencias de Lula, bajo la supervisión del actual secretario general de la FAO, el brasileño José Graziano.
Por otro lado, Cristiano Zanin Martins, uno de los abogados de Lula había destacado que «no hay ningún obstáculo legal para que el expresidente Lula viaje al exterior», porque «ya habíamos informado a la Justicia, antes del juicio de ayer, de su participación en ese encuentro de líderes políticos internacionales». Es que el letrado destacó que la Constitución le garantiza al expresidente «el derecho de ir y venir» mientras no se hayan agotado todos los recursos contra su condena. Algo que no podrá realizar luego de tener que entregar su documento internacional.