En el marco del Experiencia Endeavor que se desarrolló en Córdoba y que convocó a más de 2000 personas Punto a Punto dialogó con Julia Bearzi, directora ejecutiva de Endeavor Argentina. La actualidad del ecosistema emprendedor, el desafío de la macro y las oportunidades que ofrece el mercado.
-¿Cómo se sostiene una agenda de emprendedorismo con la situación actual del país?
-Creo que un poco lo decía Mariano (Sáenz) el fundador de Winclap en un panel, creo no hay que leer el diario. Yo tengo la fortuna de trabajar en el ecosistema, hace 20 años que trabajo en Endeavor y la coyuntura nunca acompaña, nunca. La situación económica nunca es buena. El emprendedor nunca se sienta a esperar las condiciones ideales para emprender, el momento ideal para emprender es cuando uno lo siente, detectó la oportunidad, pensó la idea y lanza. Y a los hechos me remito. A la sombra de la crisis de 2001 crecieron historias como Mercado Libre y Globant que hoy nos representan a nivel mundial y nunca esperaron las condiciones ideales.
En esa línea, Bearzi profundiza: “Hay que detectar problemas, enamorarse más del problema que de la solución e ir tras de ella, en el contexto en el que te toque. Argentina tiene un montón de cosas negativas, pero también positivas. Hoy tenemos un ecosistema cripto que es muy fuerte. Y el contexto también te convierte en un emprendedor más resiliente, e todo adrenalina, todo riesgo. La Argentina te prepara para eso”.
“Hay un pool de talento muy interesante en Argentina, eso es un distintito y se empieza a capacitar en lo que necesita el mercado. La matriz educativa se empieza a modernizar y no esperando que la educación pública se transforme”.
-¿Ustedes notan que no se modernizó la educación pública?
-No del todo. Hay algunas iniciativas menores, pero hay que ser mucho más agresivo y con decisión política. En el caso de Córdoba hay acciones muy interesantes.
-¿Hay fuga de emprendedores o se quedan?
-Yo no quiero que los jóvenes se vayan. Eventualmente que se vayan y vuelvan, que adquieran conocimiento y vuelvan. En Endeavor siempre promovemos al emprendedor que escale, de alto impacto y para eso tenés que salir de la Argentina. Más allá de las cuestiones coyunturales el mercado es chico por definición, entonces, si vos querés convertirte en un unicornio sí o sí tenés que salir de la Argentina y de la región. El lugar de residencia no es relevante, lo que nos tiene que importar como argentinos es que se genere empleo en Argentina, innovación y riqueza y que quede acá.
-¿Estamos en el mapa de los inversores extranjeros?
-Estamos en el mapa porque por suerte siempre tenemos ejemplos y referentes que nos han dejado muy bien posicionados. Hoy América del Sur también representa muchos intereses porque hay mucho por hacer, es una región que está, a priori, libre de conflictos bélicos y religiosos, eso ayuda a pensar inversiones a largo plazo y hay mucho talento. Es un lugar muy interesante para emprender.
-¿A nivel regional está bien Argentina?, por ejemplo si lo medimos en unicornios…
-Siii, tenemos 13. Chile tiene uno solo. Tenemos una tasa de unicornios per cápita interesante. Pero el ecosistema emprendedor argentino no produce solo unicornios, no es solo eso lo que nos tiene que importar. En el Experiencia Endeavor de Córdoba tuvimos un panel con tres emprendedores cordobeses y todos tienen arriba de 100 empleados cada uno.
-¿Cuáles son los cuellos de botella hoy?
-Hoy los cuello de botella para Argentina son las cuestiones regulatorias, las cuestiones regulatorias amplias como la imposibilidad de ingresar o sacar divisas. Esas son las cuestiones que espero sean puntuales y se puedan resolver. Yo miro hoy el caso de Polonia, un país parecido al nuestro, una joven democracia desde que cayó el muro y han definido una política económica de mercado y hoy son referentes. Hace 5 años te hubiera hablado de Israel y hoy hablamos de Polonia. Son un caso emblemático y muy comparable con nosotros. Tienen varios hubs de innovación y basados en la economía del conocimiento. En definitiva, el ecosistema hace mucho, necesitamos un gobierno fuerte que crea en esto y que crea en el poder transformador de esto para la sociedad. Ejemplos como el de Polonia deberían ser un faro de inspiración.