En dos jornadas, ayer por la tarde y también hoy desde a las 10.30 de la mañana, de forma presencial y on line la firma Adrián Mercado subasta unas 300 motos, scooters, utilitarios de 150 y 300 kilos de cargas, areneros, cascos, cuatriciclos y motos Patagonia Eagle propiedad de Zanella, una de las firmas más importantes de motos del país que cayó en desgracia este año.
La semana pasada, la misma firma había rematado maquinaria y equipos entre los que estaban pulidoras, cortadoras, agujereadoras, tornos, líneas de montaje a cadena, línea de pintura y lavado, autoelevadores y prensas.
Tras la fuerte crisis que vivió el sector, su titular, Walter Steiner, decidió dejar de operar: venderá la empresa, la marca y ya comenzó a rematar los bienes físicos. Al mismo tiempo, negocia con la UOM las condiciones para pagar las indemnizaciones a sus empleados.
En el largo derrotero que fue el 2019 para Zanella la empresa cerró primero su planta de Mar del Plata, después le siguió el turno a la fábrica de Cruz del Eje, tras eso despidió trabajadores en San Luis y finalmente se definió cerrar el predio en Caseros. Ayer, BAE Noticias informó que excepto los que trabajaban en Mar del Plata, el resto de los operarios está teniendo dificultades para cobrar la indemnización tal cual lo ordena la ley. A los de Caseros, por ejemplo, les ofrecieron cobrar solo el 50% y en ocho cuotas, lo que es ilegal.
En picada. En lo que va del año, el mercado de las motos se desplomó un 44%, pero en el caso de Zanella la caída fue peor y superó el 65%. Ayer, la División Motovehículos de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA) emitió un comunicado respecto de la situación de Zanella titulado: “Profunda preocupación en el sector motovehículos”.
Allí, la entidad que preside Ricardo Salomé y que tiene a Walter Lastra, como secretario General de la División Motovehículos señaló que desean “expresar la profunda preocupación por la situación que atraviesa la empresa Zanella, que ha hecho público su voluntad de desmantelar la producción de motovehículos en el país, cerrar sus plantas de fabricación, sedes administrativas y vender los actuales activos que posee. Esta situación extrema, de quien ha sido líder en la fabricación de motos en el país, no escapa a la realidad de varias fábricas del sector que evalúan medidas similares si no se implementan alternativas o incentivos que permitan vislumbrar un escenario de viabilidad de la actividad”.
Piden plan. En esa línea, la organización empresarial expresó: “El cierre de las fábricas genera un efecto derrame muy negativo en todo el sector ya que inmediatamente repercute en el cierre de concesionarios, de empresas de proveedoras y prestadoras de servicios de la industria, así como también de miles de puestos de trabajo que rápidamente desaparecerán”.
“Apelamos a que se tome real conciencia del estado de fragilidad y gravedad del sector y que se diagrame un plan económico integral que contemple esta realidad particular, de manera de asegurar la supervivencia de empresas como Zanella, con más de 70 años de trayectoria en el país. Principalmente porque no solo está seriamente comprometido su futuro y el de su gente, sino el de todo un sector que tiene un rol social muy importante en la economía por ser clave para el ingreso de una franja muy importante de la población al mercado de la movilidad”.