“Durante las crisis las franquicias tienden a robustecerse y diferenciarse del resto de los negocios”, asegura Pablo Torres, Director de 384 Group, consultora especializada en franquicias y profesionalización de pymes.
Si bien durante el 2020 el nivel de cierres de franquicias fue del 4% (menor a las bajas que registraron los comercios cuentapropistas), el sector en general experimentó un crecimiento del 30% en la facturación respecto al año anterior.
“Esto se da porque los modelos de franquicias cuentan con mucha experiencia dentro del mercado y tienen una red de contención muy sólida, tanto entre las propias franquicias como con los proveedores. Hoy, el Código Civil y Comercial regula el sistema de franquicias y establece que un negocio, para ser franquiciable, requiere de dos años de experiencia en el mercado e idealmente dos puntos de ventas, como mínimo”, explica.
En Argentina, las tasas de crecimiento de las franquicias se ubican entre el 8% y 10% anual: “Crece la cantidad de empresarios que quieren sumarse al sistema de franquicias y de franquiciados, que se suman al sistema de negocios. Hay que tener en cuenta que las franquicias le aportan al PBI de Argentina un 2%”, asegura Torres.
El Director de 384 Group estima que en el país hay aproximadamente 1.300 marcas franquiciantes y cerca de 40.000 franquiciados. “Por año se desarrollan entre 100 y 150 nuevas marcas franquiciantes. De esas 1.300 marcas, el 80% se reparte entre Buenos Aires y Córdoba, donde tenemos cerca de 130 marcas franquiciantes, es decir el 10% del total”.
Si bien hasta 2015 las franquicias gastronómicas rondaban el 60% del total, hoy representan el 40%. “Esto se debe a la incorporación de nuevos sectores de la economía que se interesan por el sistema de franquicias: es el caso de las bicicleterías, las cuales tuvieron un fuerte crecimiento durante la pandemia. Cada vez se incorporan más sectores al sistema, lo que contribuye a que sea más rentable en el tiempo”.
Perspectiva para el 2021
Para este año, el experto proyecta que el sector crecerá entre un 6% y 7% en cantidad de marcas franquiciantes y puntos de ventas. “Las perspectivas son muy buenas. En estos primeros dos meses notamos mayor demanda de marcas que quieren entrar al mundo de las franquicias y hay más consultas de quienes quieren invertir en una franquicia”, explica.
Y agrega: “Vemos que en el interior del país hay una gran oportunidad para el sistema de franquicias, es un mercado que todavía no ha explotado. Además, todavía hay muchos sectores de la economía que podrían incorporarse a este sistema de negocio. Por ejemplo, el de los gimnasios”.
En lo que respecta a los precios, una franquicia de las llamadas “low cost” puede requerir una inversión de $ 500.000, pero si se trata de marcas internacionales o multinacionales, nos vamos a los US$ 2 millones.