El 9 de diciembre pasado la Provincia debía pagar US$ 25 millones en intereses por sus bonos nominados en dólares. Pero no lo hizo. La decisión fue parte de una estrategia. Para ese entonces, la administración Schiaretti ya había empezado a negociar, antes de entrar en default, la reestructuración de tres bonos -PDCAR 2021, PDCAR 2024 y PDCAR 2027- que en total sumaban US$ 1.685 millones. Había hecho tres propuestas a los bonistas y había cosechado tres rechazos.
Al no pagar el cupón por intereses de US$ 25 millones del bono PDCAR 2021, el cuarteto negociador de Córdoba -el ministro Osvaldo Giordano, el ministro de Obras Públicas Ricardo Sosa, el titular de Bancor Daniel Tillard y el secretario de financiamiento, Roque Spidalieri- buscaba usarlo como carta de cambio y ofrecer un eventual pago cash de ese monto para destrabar la negociación. Pero el no pago también activaba un riesgo: caer en cesación de pagos si en los próximos 30 días no se lograba llegar a un acuerdo.
Para ello era necesario llegar al 66% de adhesión del global y al 51% de cada uno de los tres bonos. No era fácil y uno de los grupos de bonistas tenía poder de bloqueo. Ya en período de gracia hubo una cuarta propuesta, el 14 de diciembre, y una quinta propuesta el primero de enero.
El sábado 9 de enero, cuando se cumplían los 30 días del no pago de los intereses y la amenaza del default era un hecho la Provincia arrancó la jornada sin acuerdo. El domingo tampoco hubo acuerdo. Y el lunes 11 los funcionarios comenzaron el día sin acuerdo y la cesación de pagos sobre la mesa.
Finalmente, recién a las 14 horas del lunes pasado se acordó con los bonistas. Pero se movieron muchas piezas y la Provincia tuvo que resignar varias posiciones desde su pretensión original al acuerdo rubricado al final.
La primera oferta que hizo la Provincia era pagar el 1% de interés hasta 2022 y 5% el en adelante. Y pagar el capital en cuotas trimestrales variables desde septiembre de 2023 hasta diciembre de 2026.
La contrapropuesta que llegó de los bonistas fue lograr pagos trimestrales del 5% hasta junio de 2022 y del 7.125% hasta 2026. Y cobrar el capital entre 2021 y 2024.
La quinta propuesta, el 1 de enero de este año, encontró a la Provincia ofreciendo un interés inicial del 2,75% en 2021; 4,25% en 2022 y 5,75% adelante. Y comenzar a pagar el capital en 2023.
A favor de los bonistas: El lunes 11 se acordó algo más cercano a lo pretendido por los bonistas. Según anunció el propio gobernador en conferencia de prensa el lunes por la tarde se acordó un interés promedio del 6,08%. Ese número para la tasa de interés podría considerarse un buen acuerdo para los bonistas, ya que no los aleja tanto de su pretensión original. Además, es una tasa importante en un contexto que el mundo está pagando tasas negativas o muy cercanas a 0%.
Un dato: la tasa promedio que pagará la Provincia es muy superior a la que logró el ministro Martín Guzmán para la Nación. El economista acordó bajar la tasa de interés de 7% a 3,7%. En ese sentido, se acerca más a la tasa promedio que acordó la Municipalidad y que rondará el 6%.
Pago cash: otro punto a favor de los bonistas es que lograron un compromiso para que “el 60% de la Contraprestación por intereses devengados que recibirán los Tenedores que presenten Consentimientos válidos y aceptados de conformidad con las Solicitudes de consentimiento se pagará en efectivo”. Y si esto aplica para el pago del cupón que venció en diciembre por US$ 25 millones, la Provincia deberá abonar US$ 15 millones a los bonistas. La intención del equipo de funcionarios era que ese pago sea de US$ 7,5 millones para los que acepten al 14 de enero.
A favor de la Provincia: lo más importante para Córdoba fue el aplanamiento de la curva de vencimientos. No habrá pagos de capital ni en 2021 ni en 2022. Así el bono PDCAR 2021 que debía abonarse en junio por US$ 720 millones comenzará a pagarse en 2023 y hasta 2026.
El 26 de enero se informará el nivel de adhesión que logró la Provincia.
Para adelante, quedará el debate sobre el perfil de deuda de la provincia y la conveniencia sobre atar los compromisos de deuda a monedas extranjeras, cuando la devaluación del peso es una constante. Cabe recordar que sólo por el movimiento del dólar en un mes la deuda de la Provincia creció $ 5.000 millones y escaló a $ 223.000 millones. Esto es porque el 86% de toda la deuda de Córdoba está en dólares, el 3,4% en euros y sólo el 5,44% en pesos.