Por estos días se está cumpliendo un año del inicio de la cuarentena dispuesta por el gobierno nacional para contener el avance del Covid-19. Primero con Aspo y después con Dispo, lo cierto es que todavía son muchos los economistas, analistas, empresarios y cámaras privadas que remarcan que el impacto de las medidas fue muy dañino para el entramado productivo.
De hecho, para tratar de impulsar medidas que intenten sobrellevar la dura situación del sector privado desde Córdoba un grupo de empresarios pymes impulsó la creación de la Red de Cámaras Pyme, un espacio federal, que logró captar a 300 cámaras empresariales en una decena de provincias. El resultado fue que lograron llevar buena parte de las medidas e iniciativas de interés para el emrpesariado a las mesas de diseño de políticas nacionales y provinciales.
Con esos logros, hoy la Red de Cámaras Pyme intenta sentar las bases para una nueva agenda, resumida en un nuevo programa de medidas que complementan las medidas ya implementadas, “de forma urgente para acelerar la reactivación productiva y amortiguar el eventual impacto en el desarrollo productivo de la segunda ola del coronavirus en Argentina, garantizando así la continuidad del empleo sin que toda la carga recaiga directamente sobre las micro, pequeñas y medianas empresas”, según remarcaron.
Estas son las medidas centrales del programa 2021:
- Créditos para capital de trabajo: Como complemento necesario de las líneas para inversión en activos fijos, es prioritario garantizar a las MiPyMEs el acceso al crédito para capital de trabajo con tasas no superiores al 18% anual y garantías del FOGAR, para reponer stocks de mercadería y evitar el corte de la cadena de pagos y el cierre de empresas por iliquidez. Requerir aportes complementarios de los gobiernos provinciales para dotar de suficientes garantías al sistema y contribución de los bancos provinciales en la implementación de las líneas de crédito a nivel local. Los créditos deben ser por un monto no inferior a 3 meses de facturación promedio (tomando valores del balance 2019 ajustado por Índice de Precios al Consumidor), con 6 meses de gracia y 3 años de plazo. Los bancos deben estar obligados a destinar los fondos a estos fines para evitar la suba de encajes.
- Asignaciones para grupos de riesgo por COVID-19: Los salarios de empleados que son parte de un grupo de riesgo definidos por el MSN con relación al COVID-19, a partir del mes de marzo de 2021 y hasta que los mismos puedan reinsertarse a sus puestos de trabajo habituales deben estar cubiertos por una asignación específica.
- Asignaciones para el cuidado de hijos/as: El valor proporcional al salario por los días en que los empleados deben ausentarse para atender el cuidado de sus hijos/as al no asistir a la escuela por razones de índole sanitaria deben estar cubiertos por una asignación específica.
- Ampliación de moratorias impositivas: Los gobiernos en todos los niveles (nacional, provincial y municipal) deben suspender las caducidades de las moratorias y planes de pagos hasta que se superen los efectos de la pandemia del coronavirus, y anular los intereses moratorios y punitorios por las deudas impositivas del año 2020.
- Medidas de flexibilización del BCRA y en servicios: Extensión de las medidas de suspensión del cierre de cuentas bancarias y obligación de requerir libre deuda de aportes y contribuciones en carácter urgente, plazos para cubrir cheques y saldos impagos y eliminación de intereses punitorios de créditos. Flexibilización del pago de deudas de servicios contraídos por MiPyMEs durante la pandemia.
- Planes de empleo pyme: Creación de nuevos planes de empleo especialmente dirigidos a jóvenes y otros grupos poblacionales en los cuales el desempleo prevalezca, acompañando y cofinanciando el esfuerzo que las pymes pueden hacer para su entrenamiento, inserción y reinserción laboral de forma exitosa e integrados totalmente a la pyme.
- Incentivos al empleo: Transición entre la doble indemnización y la prohibición de despidos (medidas de urgencia pero que desalientan la creación de nuevos empleos) hacia un esquema de incentivos con una disminución escalonada de las contribuciones patronales que promuevan el incremento de la nómina de empleados formales en las MiPyMEs de todo el país y todos los sectores, extendiendo a nivel nacional y a otros sectores el Beneficio en Contribuciones Patronales.
- Administración estratégica de importaciones pyme: Urgente levantamiento de restricciones y licencias no automáticas en importaciones de insumos y bienes críticos para la producción pyme.
- Plan de asistencia pyme inmediata en contextos de ASPO y DISPO: A nivel nacional provincial y municipal debe planificarse y establecer previamente las medidas “gatillo” que se implementarán de forma automática en caso de restablecerse situaciones de ASPO o DISPO que afecten el normal desarrollo de las actividades comerciales, productivas y de servicios. Las MiPyMEs no están en condiciones de amortiguar el shock financiero, y deben ser asistidas de forma oportuna y masiva en un eventual retroceso en el proceso de reapertura de la economía.
- Comisión Pyme en el Consejo Económico y Social: Concretar la conformación de la Comisión Pyme en el Marco del Consejo Económico y Social para tratar con visión de largo plazo los temas estructurales que hacen a la competitividad de las pymes y su interrelación con el desarrollo social y económico en general.
“Es urgente y prioritario analizar esta etapa con la mirada puesta en que la solución es pyme, porque las pymes son las únicas con posibilidad de poner el país y a cada una de sus regiones y localidades en marcha. La Agenda Pyme tiene claramente un capítulo urgente, pero en paralelo exige trabajar decididamente sobre los grandes temas estructurales que hacen al futuro de nuestro país”, destacan desde el espacio pyme.