Las autoridades de la Cámara de Supermercados y Autoservicios de Córdoba, encabezadas por su presidente Víctor Palpacelli presentaron el balance 2019 del sector y las perspectivas para el año próximo. Gastón Utrera, titular de la consultora Economic Trends, fue el encargado de realizar el relevamiento sobre el comportamiento del mercado en los últimos años y las variables que impactarán en el desarrollo de la actividad en los próximos meses.
A continuación, algunos de los lineamientos:
- El sector aporta 12.00 puestos de trabajo directos y formales a la actividad económica productiva de la provincia.
- La caída interanual (2019-2018) en Córdoba en ventas, promedio entre 7 y 10% en unidades; teniendo en cuenta que aún no cerró diciembre, mes tradicionalmente bueno para el sector.
- Ventas en supermercados: caída del 16%, septiembre 2017-septiembre 2019, tanto a nivel nacional como provincial (Fuente Indec, medida a facturación a precios constantes).
- Ventas de autoservicios mayoristas, acumula una caída interanual del 17.9%, septiembre 2017-septiembre 2019, a nivel nacional (Fuente Indec, medida a facturación a precios constantes).
- Responsable de estos números: fuerte caída del poder adquisitivo de los salarios, 16.1%, periodo septiembre 2017-septiembre 2019.
- Un escenario optimista para el supermercadismo en 2020 podría producirse en caso de que resulte exitosa la renegociación de la deuda pública en los primeros meses del año; la emisión de dinero, la política de dólar administrado y las restricciones cambiarias permitan reducir las tasas de interés; el acuerdo de precios y salarios logre bajar el ritmo de la inflación; por mejores expectativas, menores tasas de interés, y menor inflación, comience a recuperarse el consumo. “Un escenario de estas características, de todos modos, sólo implicaría que comenzaría la recuperación; difícilmente implique fuerte crecimiento del consumo”, señala el informe de Economic Trends.
- Un escenario pesimista para el supermercadismo en 2020 podría producirse en caso de que fracase la renegociación de la deuda pública, y entremos entonces en default; la incertidumbre económica implique nuevamente altas tasas de interés; el acuerdo de precios y salarios no logre ni siquiera moderar la inflación; con peores expectativas, altas tasas de interés y alta inflación, continúe cayendo el consumo.