(Télam) La cuarentena dispuesta por el gobierno nacional para morigerar el avance del coronavirus incrementó el uso de las billeteras electrónicas y en el sector vislumbran que en el país se está dando un nuevo paso hacia una economía sin dinero físico para las transacciones.
Los principales actores del sector también mantienen la expectativa de ser utilizadas por el Estado como canales para llegar a quienes no tienen cuentas bancarias, como sucede en la actualidad con un importante número de potenciales beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE).
Las billeteras digitales 100% fintech, es decir que no son una unidad de negocio de un banco tradicional, por el momento no están comprendidas como herramienta de pago de este beneficio.
Según anunció la cámara que agrupa a las fintech, la decisión que les comunicó el gobierno fue la de «priorizar medios más robustos y probados». Más allá de esta situación, la cámara indicó a sus socios que con el Estado «seguiremos con los procesos de convenios para otras prestaciones y desembolsos».
«Seguimos dispuestos a ayudar al gobierno nacional en lo que ellos dispongan», señaló Alex Torriglio de la firma Xcoop, bajo el convencimiento de que las «plataformas digitales evitan el manejo de efectivo y contribuyen a morigerar el riesgo de contagio».
«En particular, en Naranja X estamos evaluando la posibilidad de sumarnos», indicó a Télam el responsable de la empresa, Gastón Irigoyen, para agregar que «el pago de las asignaciones de Anses, como el IFE, mediante billeteras virtuales es un paso importante para toda la industria y una alternativa viable para quienes no están bancarizados pero cuentan con un celular».
Explicó que la coyuntura impuesta por la pandemia «impulsó la adopción de herramientas de pagos sin contacto» y que «ayudó a evidenciar que, a futuro el uso del efectivo debería disminuir pues ya está comprobado que el manejo de efectivo es inseguro, incómodo y en este contexto también un foco de infección».
El uso del efectivo debería disminuir pues ya está comprobado que el manejo de efectivo es inseguro, incómodo y en este contexto también un foco de infección”
Analistas del ambiente fintech coincidieron en que la «debilidad» de las billeteras para los pagos a no bancarizados es «cultural» y que por lo tanto incluye la educación tecnológica y financiera.
«Desde el 20 de marzo la realidad cambió sustancialmente», indicó el responsable en Argentina de 4Finannce, Salvador Calogero, para luego precisar que el pago presencial se redujo desde un 60% al 30% tras el inicio de la cuarentena; mientras que las transferencias bancarias treparon del 30% al 50% y los pagos digitales del 10% al 20%.