La Bolsa de Comercio de Córdoba elaboró un informe centrado en el dato de la inflación de marzo conocido en la jornada de ayer (3,3%) y en la emisión de dinero récord que por estas horas lleva adelante el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
En ese sentido, desde la entidad que conduce Manuel Tagle, sostienen que “la inflación en marzo fue de 3,3%, superior al 2,6% esperado, pero acotada en relación al brutal aumento de la emisión”. Siguiendo esa línea, la entidad se pregunta por qué aún no se disparó la inflación.
“En primer lugar, gran parte de lo emitido (unos 557 mil millones) aún está en poder de los bancos y el gobierno, por lo que el circulante en manos del público ‘solo’ creció un 10% desde finales de febrero. Esto refleja la lentitud de los bancos en otorgar créditos blandos para PyMEs, tal como lo anunció al gobierno. En segundo lugar, otro argumento para la, por ahora, baja transmisión de la emisión récord a precios es que en el contexto actual hay demanda por liquidez de empresas y trabajadores”.
En el informe se destaca que “el gobierno se apoyó en la emisión monetaria como salida para financiar al Tesoro e inyectar liquidez al sistema. Desde fines de febrero, la base monetaria creció en más de 733 mil millones de pesos, es decir un 43% de aumento; para poner en contexto esta cifra, en todo 2019 la base monetaria creció 35%”.
El informe añade que “ya en abril, a medida que la inyección de dinero se acelere, las presiones inflacionarias se manifestarán y probablemente con fuerza si esta tendencia de emisión monetaria se mantiene. En efecto, uno de los primeros precios en reaccionar frente a estas expectativas es el tipo de cambio; el dólar negociado en el mercado de capitales tuvo una suba abrupta en los últimos días, superando los 110 pesos y elevando la brecha cambiaria respecto al tipo de cambio mayorista a casi 70%”.
Si bien en esto influyen las restricciones de oferta de divisas, junto con el overshooting por la delicada situación económica y la cercana definición de la renegociación de la deuda pública, “la reacción del mercado cambiario es una señal preocupante que podría anticipar traslados a precios y la aceleración de la inflación”, agrega la Bolsa.
“Lo anterior resalta la importancia de que la expansión monetaria sea temporaria y que se vayan retirando los excedentes de pesos del mercado cuando la actividad económica retorne a la normalidad. Una primera medida en esta dirección se observó con la licitación de LELIQs el día martes, en donde se absorbieron 180 mil millones de pesos en un intento de frenar la escalada del tipo de cambio bursátil”, completa la entidad.
En el informe se destaca que en plena expansión de coronavirus, Argentina ve limitada su capacidad de expandir el gasto, en un contexto en donde la recaudación cae abruptamente por la menor actividad económica, la presión impositiva es muy elevada y no cuenta con acceso al crédito interno y externo.