Tomás Allende explica que los 81 años de Sanatorio Allende “no son una foto, sino una película”. En ese sentido, le dijo a Punto a Punto que 2018 fue el año de mayor crecimiento de la historia del sanatorio, para la entidad, por lo que el presente año los encontró en plena expansión, “pero en otro contexto, con inflación, con bonos, con reperfilamiento”.
Allende hace hincapié en que en medio de ese proceso “estábamos sumando tecnología, incorporando gente, por lo que no había forma de parar, ni siquiera nos planteamos la posibilidad de pensar de cambiar el rumbo. Por eso hablo de esto como una película, porque en este contexto muchos dirán ‘qué hacen estos locos que siguen con la expansión’”.
Los números marcan un crecimiento respecto al año pasado. Por caso, en el rubro personal (incluyendo médicos, colaboradores directos e indirectos) se pasó de 3.200 a 3.391. En cuanto a las prácticas, todos los ítems registraron crecimiento: internaciones (de 43.548 a 46.813); cirugías (de 25.958 a 27.348); consultas por consultorio (de 877.796 a 990.612); atenciones por guardias centrales (417.987 a 452.380) y trasplantes (de 97 a 103).
Entre Manantiales, Nueva Córdoba y el Cerro
“No tener deuda es lo mejor que nos ha pasado”, dice Tomás Allende. Esa afirmación es la que deja la puerta abierta de que la expansión continúe, pese a la “prudencia” de que la hacía referencia el directivo del Allende, antes de concretar “el” proyecto para los próximos años: la construcción del Sanatorio en Manantiales, la mega urbanización de Grupo Edisur.
“Respecto a Manantiales nos está costando mucho tomar la decisión para definir el máster plan, porque es tan grande el proyecto que cualquier error lo vamos a pagar muy caro. Ojalá sea el próximo paso, pero no descarto que antes hagamos otras cosas”, sostuvo Allende.
En ese sentido, señaló que “está la posibilidad de ampliar los dos sanatorios: son proyectos autorizados y aprobados y estamos discutiendo cuándos los concretamos. En Nueva Córdoba nos quedó chico la parte de servicios ambulatorios y hay un edificio donde hoy funciona el consultorio de pediatría y está proyectado un edificio entero para ‘ambulatorio’. Y en el Cerro hay un tercer piso (actualmente hay dos) para destinarlos a internación y consultorios”.