Fonterra, la cooperativa láctea de Nueva Zelanda, sigue encabezando el lote de candidatos a quedarse con SanCor, en medio de negociaciones cada vez más complejas. Así lo afirmaron fuentes del mercado a NA, que al ser consultadas sobre el futuro de la cooperativa en proceso de convertirse en una sociedad anónima si es necesario, expresaron que el CEO de Fonterra visitó tres veces el estudio de Orlando J. Ferreres & Asociados.
Ocurre que Ferreres es el encargado de motorizar las negociaciones de los clientes interesados en adquirir la cooperativa fundada en 1939. Según las mismas fuentes, para las próximas semanas se espera la llegada de interesados en adquirir la firma argentina provenientes de China, Francia, España y, de nuevo, Fonterra de Nueva Zelanda.
El interés de SanCor es llegar a buen puerto con las negociaciones antes del 30 de octubre, porque el oxígeno financiero se acaba, ya que el gobierno incumplió con el auxilio prometido de 450 millones de pesos, ya que a esa cifra le faltaron 150 millones.
De las 14 plantas que posee SanCor están en cese de actividades cuatro, y al resto -al igual que otras empresas del sector lácteo- le falta materia prima, ya que las inundaciones y anegamientos dificultan o impiden sacar la leche de los tambos.
SanCor tiene un pasivo importante y los clientes son los encargados de evaluar cuál será la oferta que darán, para lo cual requieren información y concurren al estudio del economista Orlando Ferreres o se entrevistan con los ejecutivos de la cooperativa.
En general, según pudo saber Noticias Argentinas, evitan decir un valor de oferta para no tener que retractarse hasta que las negociaciones estén avanzadas. La posición de Fonterra es bastante privilegiada por ser una cooperativa al igual que SanCor, con una estructura de base similar.
Fonterra, entidad cooperativista conformada por 10.500 productores de Nueva Zelanda, quienes son los accionistas de la empresa que congrega así al 90 por ciento de los tamberos de ese país que aportan por año 16 mil millones de litros.