Enzo Cravero es el presidente del Ente BioCórdoba, el cual tuvo un papel relevante hace pocas semanas con la organización de la Cumbre Mundial de Economía Circular.
En diálogo con Punto a Punto, Cravero brindó detalles del rol que está teniendo la ciudad de Córdoba en materia de economía circular, y las posibilidades de desarrollo de cara al futuro.
“En Córdoba estamos muy avanzados en materia de Economía Circular respecto a otras ciudades de Latinoamérica. Uno de los propósitos de gestión del intendente Martín Llaryora es instalar este concepto de Economía Circular en los distintos sectores y actores de la ciudad. Hemos trabajado en una mesa de debate y consenso que se dio a partir del clúster de economía circular”, señaló Cravero.
“Hemos creado instituciones que se encargan de este mismo objetivo, una de ellas es el Bio Córdoba, otro es el instituto de Protección Ambiental, y creamos el juzgado de Faltas Ambientales. De esta manera tenemos el órgano que potencia, el que fiscaliza y el que brinda las normas”, explicó Cravero.
Y añadió: “El COYS también se sumó en materia de economía circular a partir de un centro de transformación de residuos. Lo mismo pasa con Cormecor que desde el predio de enterramiento permite que se traten los residuos y los vuelvan materia prima para la economía circular”.
-¿A partir de estas iniciativas surgió el Clúster de Economía Circular?
-Claro. Así se creó el Clúster de Economía Circular, y junto al sector del conocimiento como universidades; empresas, la industria, y los emprendedores empezamos a definir una hoja de ruta de trabajo. Empezamos a trabajar en un marco normativo para los distintos actores de la Economía Circular, se creó la primera escuela de economía circular, se generaron incentivos para emprendedores. Estamos convencidos de que la transformación viene de la mano del sector privado, entonces avanzamos fuerte en darle soporte a ese sector.
El próximo desafío es generar mecanismos de certificaciones. A partir de la normativa, generar incentivos para las empresas certificadas. Generar sellos de productos de la economía circular, incentivos fiscales y una serie de acciones más.
– ¿Se puede medir lo que genera la Economía Circular?
-Es el paso que sigue. Estamos creando estándares métricos para medir el impacto real, no solo de las políticas públicas, sino para mostrar como el sector privado modificó sus procesos productivos, la gestión de los residuos y como distintos sectores industriales comenzaron a modificar su forma de pensar.
En este contexto económico complejo, la economía circular es una oportunidad, por eso lo impulsamos con tanta fuerza. El intendente lo plantea con una visión no romántica, sino como una necesidad. El mundo en general está girando hacia este tipo de industria más sostenible. Se está generando mucho empleo verde. Las empresas lo están viendo y se están adaptando.
– ¿Qué evaluación hacen de la Segunda Cumbre de Economía Circular?
-Fue un hito. Ubicó a Córdoba a la vanguardia como alguna vez estuvo. En la gestión de Rubén Martí se vio a Córdoba a la vanguardia en materia de sustentabilidad y ambiente. Imagináte si eso se hubiera mantenido 20 años. Estaríamos en la vanguardia del mundo en materia de ambiente porque hubo un estadista que pensó la ciudad de esta manera. Creemos que la cumbre nos dio la oportunidad de poner a Córdoba en ese lugar del que nunca se debió haber ido. Generamos un evento de mucha calidad que permitió millones de interacciones entre distintas organizaciones, rondas de negocios y mucha sinergia en toda la región de Latinoamérica.