Alaya Capital está próximo a cerrar su tercer fondo de inversión por US$50 millones que cuenta con empresarios como Roberto Souviron, uno de los fundadores de Despegar y la incorporación del exfutbolista Hernán Crespo.
También participan los argentinos Grupo Supervielle y Grupo Murchison, y el chileno Grupo Kawen, además de otros family offices de la región que buscan financiar startups latinoamericanas con el fondo Alaya III que busca invertir en 25 compañías de Latam.
“Hicimos el primer cierre a fines del año pasado, en los próximos meses los vamos a cerrar definitivamente y nos vamos a dedicar completamente a invertir en startups de base tecnológica que se encuentran en etapas tempranas con foco en la región”, comentó Luis Bermejo, socio directivo y co fundador de Alaya Capital.
En sus diez años de trayectoria, Alaya logró captar fondos por US$ 22 millones, ya lanzó su tercer fondo e invirtió en 40 startups, entre las que se encuentra el primer unicornio social de América latina, Betterfly, una plataforma que entrega beneficios y un seguro de vida que crece sin costo para trabajadores latinos.
Hoy Alaya tiene presencia en México, Colombia, Perú, Chile y Argentina: “no estamos pensando en expandirnos, nos interesa profundizar la presencia en México y Colombia que son nuestros mercados más nuevos”, comenta.
Tendencia
Para Bermejo, “actualmente hay buena base de startups en nichos que se van poniendo de moda, hoy las que están en boga son aquellas que se relacionan con la inteligencia artificial”. Sin embargo reconoce que un factor negativo es el fondeo: “está complicado conseguir fondos porque se acabó la liquidez por consecuencia de la crisis que atraviesa la macroeconomía”.
“Las startups que logran tener un crecimiento perdurable en el tiempo son aquellas que tienen un modelo de negocio sustentable, que no depende de seguir levantando capital y que logran encontrar un producto que les permite ser rentable”, analiza uno de los fundadores de Alaya.
Sobre el boom de la inteligencia artificial, Bermejo explica que todavía no hay nada muy claro sobre esta nueva tecnología: “es un avance muy importante y se espera que sea un gran salto dentro del mundo de la tecnología. No creo que vaya a reemplazar a los trabajadores o sea perjudicial para el ámbito laboral. Recién se están analizando los primeros impactos en cuanto a oportunidades y amenazas”.
Para Bermejo, Córdoba está bien posicionada en cuanto al nivel de las startups y es la plaza más importante del interior del país: “después de Buenos Aires, Córdoba tiene el mercado de startups más desarrollado de Argentina”.
Sin embargo, asegura que hoy al sector le falta integración global: “es necesario que los equipos de emprendedores argentinos se integren con los equipos de otros países. Falta integrarse para aumentar el nivel de calidad global de las startups”.
Sobre la macro
“La economía argentina nos tiene acostumbrados a una incertidumbre constante. La inflación, el salto de moneda, la falta de previsibilidad y las reglas de juego poco claras hacen difícil el desarrollo de negocios. En un año de elecciones es peor porque no se sabe que va a pasar de acá a seis meses y se profundiza el grado de incertidumbre que venimos arrastrando”.