Para los exportadores, el análisis de la realidad no dista mucho del análisis que hacen desde otros sectores de la economía local.
El presidente de la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba, Marcelo Olmedo (foto), aseguró que la presión tributaria a nivel nacional, provincial y municipal le está quitando competitividad a las empresas argentinas. “Es imprescindible racionalizar y eficientizar el gasto público para que el sector privado vuelva a ser competitivo y así retomar una senda de desarrollo económico”, analiza.
Desde el cambio de administración política a nivel país, sin duda mejoraron algunas cuestiones. “Hay diálogo e interlocutores capacitados que comprenden los problemas del sector productivo.
También mencionar que las reformas necesarias no están ocurriendo a la velocidad que nuestro sector esperaba. Aquí puede haber una confluencia de optimismo excesivo, turbulencia política y falta de experiencia en el Gobierno actual en algunas áreas”, reconoce Olmedo.
¿Qué políticas sectoriales le sugeriría al Gobierno?, preguntó PaP. “Desde el sector productivo inserto en el comercio exterior necesitamos mejorar rápidamente las condiciones para poder competir y garantizar un desarrollo más sustentable. A nivel nacional hay dos grandes temasnajar el costo operativo del comercio exterior, fundamentalmente del interior del país, a través de eficientizar la logística, la operatoria aduanera y la operatoria bancaria. Y en segundo lugar, facilitar el acceso a la importación de insumos, repuestos y bienes de capital de manera de poder producir a costos competitivos y con estándares de calidad internacionales”.
Asimismo, desde CaCEC afirman que sería deseable que hasta que se logre una verdadera reforma tributaria nacional, que la Provincia disminuya la presión tributaria a través de una reducción gradual y planificada del impuesto de Ingresos Brutos. “Es un impuesto absolutamente distorsivo que afecta gravemente la competitividad y además encarece los productos en Córdoba”.
“Hay sectores grandes de la economía que todavía no están invirtiendo y esto fundamentalmente por la falta de competitividad. La reducción de la presión tributaria es un factor clave para esto”, sentencia Olmedo.