(EFE) El número crece hora tras hora. En el último parte oficial, autoridades mexicanas dijeron hoy que la cifra de muertos por el terremoto de magnitud 7,1° en la escala de Richter que sacudió varios estados del centro del país se incrementó a 248.
El Coordinador Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente, dijo que en la Ciudad de México se reportaban 117 muertos, mientras que el estado de Morelos, al sur de la capital, registraba 72 fallecidos.
En el estado de Puebla, donde se produjo el epicentro, ya sumaban 43 los muertos, en el Estado de México eran 12 las víctimas, Guerrero registraba tres fallecidos y había una más en Oaxaca, al sur del país, región que fue sacudida hace unos días por un terremoto de magnitud 8,1°.
«Lamentablemente varias personas han perdido la vida, incluyendo niñas y niños, en centros educativos, edificios y viviendas. Quiero expresar mis condolencias a quienes perdieron un familiar o un ser querido», dijo el presidente Enrique Peña Nieto en su primer mensaje.
Por su parte, el oficial José Luis Vergara, quien coordina el rescate, detalló el trabajo de los socorristas en una de las escuelas derrumbadas: «Es el lugar donde tenemos el mayor número de pequeños que perdieron la vida».
Puente aclaró que la cifra de muertos puede aumentar dado que se «reportan personas desaparecidas» que se teme estén en los escombros de decenas de edificios colapsados.
El terremoto ocurrió a las 13:14 locales (15:14 hora argentina). El epicentro se ubicó entre los estados de Puebla y Morelos, cerca de la capital.
Según la alcaldía de Ciudad de México, unos 50 edificios colapsaron en zonas del centro y sur de la capital, donde al anochecer muchas personas observaban desalentadas sus hogares severamente dañados.
Los barrios más afectados se encuentran sin energía eléctrica, interrumpida por las autoridades para evitar posibles explosiones ya que se reportaban fugas de gas natural, que corre en tuberías subterráneas.
Las autoridades han dispuesto albergues para que pasen la noche familias que han perdido su casa o registra severos daños estructurales, mientras que otras dormían en la calle o donde familiares.
Al colapsar las comunicaciones telefónicas, la mensajería por WhatsApp se convirtió en la única forma de comunicación en el centro del país. Algunas personas que fueron rescatadas de los escombros consiguieron ser localizadas gracias a esa aplicación, según rescatistas.